El último latido sepultado. Pompeya

En 1738, el futuro rey Carlos III de España, que por entonces lo era de Nápoles, encargó al ingeniero español Joaquín de Alcubierre comenzar las excavaciones en una zona de la Campania que durante años había sido famosa por sacar a la luz de vez en cuando ciertos tesoros antiguos. Alcubierre comenzó las excavaciones en…