El robo del tiempo para el duelo: el llanto como reconocimiento del otro
La Ilíada homérica ha sido catalogada en diversas ocasiones, y no por plumas inexpertas, como «el poema de la fuerza» o de la violencia, al decir de Simone Weil o Rachel Bespaloff[1]. Sin desechar esta vertiente, pero considerándola ahora complementaria o secundaria, en las líneas sucesivas se defenderá algo más cercano a lo esgrimido por Jasper Griffin,…





